Últimamente, me he estado dando cuenta de lo veraz que es esta frase famosa de la física cuántica que dice que atraemos lo que, subconscientemente, creemos que somos.
Todas las personas que llegan a tu vida tienen algo que enseñarte; ya sea se comporten como un espejo que refleja tus miedos, creencias y/o inseguridades; o traen con ellas un desafío que te ayudará a continuar creciendo personal y espiritualmente.
Por ejemplo: si estás pasando por un periodo en el que te sientes vacía, incompleta o infeliz y estás buscando alguien que te aporte esa felicidad; es bastante probable que atraigas personas que en el fondo, también, se sientan infelices, vacías e incompletas. Y, como resultado, tendrás la receta perfecta para una relación tóxica (de cualquier índole, no necesariamente de pareja).
Algo que he visto en mi práctica como coach y en mi propia vida, es que cuando le dices al Universo: “Ya estoy cansada de sentirme así, de vivir así y de atraer siempre los mismos resultados. Estoy dispuesta a hacer lo que sea para salir de esta situación, por favor guíame”….
El Universo se pone manos a la obra enviándote un desafío que te ayudará a avanzar y muchas veces llega a través de otras personas. Sin embargo, como suele ser algo a lo que no estás acostumbrada, podrías sabotearlo o pensar que no es para ti.
Poniendo de ejemplo una situación romántica… Podría llegar a tu vida alguien que se siente super seguro de sí mismo y que se siente atraído por ti; pero, es independiente y no te necesita para ser feliz…Y si no te das cuenta que esa es la respuesta del Universo a tu pedido; tu programación mental, subconsciente, te podría llevar a pensar: “no le gusto” o “no me quiere lo suficiente, sino haría esto o lo otro”.
Y este tipo de desafíos pasan en todas las áreas de tu vida. Pasan en campos de salud, cuando empiezas a atraer doctores o profesionales que te dejan de tratar como una niña y te miran como la adulta responsable de tu salud.
Pasan en el campo del coaching y en las terapias psicológicas, cuando decides buscar una guía que te acompañe en este crecimiento; pero la guía que encuentras no fomenta una relación de dependencia emocional y te trata como una adulta capaz de hacerse responsable de su vida.
Y es así como el Universo comienza a decirte, sutilmente, que llegó el momento de tomar las riendas de tu vida y que si, realmente, quieres crear una nueva historia, tienes que poner de tu parte en este proceso de creación.
Por que te aseguro que con el acompañamiento adecuado, te darás cuenta que tienes dentro de ti el poder y la capacidad para hacerte cargo de una situación y darte lo que necesites para estar bien.
Y así verás que comienzas a vibrar más alto, a sentirte mucho mejor y a atraer personas y experiencias que estén alineadas con el crecimiento que has cosechado.
Entonces, ante cualquier desafío que la vida ponga en tu camino, ante cualquier encuentro incómodo, pregúntate: ¿Será que el Universo me está queriendo mostrar algo?
Porque recuerda, nada es casual.