Aprender a tomar mejores decisiones es trascendental, no por el hecho de evitar el error (por que es inevitable); si no, para sentirte segura y tranquila de qué hiciste lo mejor.
A veces, la vida te presenta varios caminos y decidir es vital para continuar avanzando; sin embargo, puede ser complicado si en el pasado te equivocaste y las consecuencias afectaron tu vida.
Una vez que tu alma se inquieta, mirar hacia atrás ya no es una opción; salvo que estés dispuesta a pasarla mal emocionalmente.
¿Qué hacer si aún no te sientes preparada?
1. Conecta con lo que realmente deseas:
Para mí, el primer paso para tomar mejores decisiones, es conectar con lo que realmente deseas. Para eso puedes preguntarte:
¿Quién necesito ser para sentirme una mujer plena? ¿Satisfecha? ¿Orgullosa de mí misma? ¿Realizada? ¿Qué actitudes y hábitos necesito desarrollar?
2. Ten la convicción y elige:
Segundo, tener la convicción de elegir una ruta, aunque todavía no sepas cómo harás para seguirla.
3. Prepárate con las herramientas necesarias:
Tercero, es clave para tomar mejores decisiones, prepararte ¿Cómo? Obteniendo las herramientas necesarias para seguir tu camino.
Si te das cuenta, no se trata de lanzarte a la piscina sin saber nadar. La preparación, es igual de importante que el salto…
De hecho, es irreal pensar que al saltar todo se va a pintar color de rosa, porque por momentos será difícil.
Sin embargo, si tu impulso está motivado por un deseo auténtico, te será más fácil sostenerte en medio de la turbulencia.
Además, te ayudará a seguir, sin regresar con el rabo entre las piernas al lugar en el que probablemente no mereces estar.
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4. Disminuye tu ritmo:
Otro paso, es disminuir tu ritmo y dejar de hacer todo en automático. Darte un tiempo para observar las señales divinas que se presenten en tu camino; y si aparecen, te aconsejo de corazón seguirlas.
5. Sé honesta contigo misma:
Se honesta contigo respecto a lo que estarías dispuesta a hacer, invertir y dar para lograr lo que te propongas.
Al final, pasé lo que pasé, siempre te podrás llevar una lección y recalcular el camino.
6. Evita preguntarle a todos:
Finalmente, evita preguntarles a TODOS que es lo mejor para ti.
He estado en ese lugar y el único resultado que obtendrás es mucha confusión y la posibilidad de victimizarte, echándole la culpa a otros…
En conclusión: nada bueno.
Una mujer segura de sí misma, es capaz de decidir y hacerse cargo de las consecuencias de sus actos, es parte de crecer y madurar.
Me encantaría escucharte
Como siempre, me encantaría saber de ti.
¿Cómo a sido tu experiencia tomando decisiones? ¿Qué te ha dado el valor para dar un paso adelante?
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